Una heladera es uno de los electrodomésticos más importantes en cualquier hogar. Mantenerla en buen estado es clave para prolongar su vida útil y evitar reparaciones costosas. Aquí te damos algunos consejos prácticos:

1. Limpieza regular de las bobinas: Las bobinas de la parte trasera o inferior de la heladera son las responsables de disipar el calor. Cuando están sucias, el sistema de enfriamiento trabaja en exceso, lo que puede reducir la eficiencia y la vida útil. Límpialas cada 6 meses con un cepillo o aspiradora.

2. Verifica la temperatura adecuada: Mantén el refrigerador entre 1 y 4°C, y el congelador en -18°C. Esto asegura que los alimentos se mantengan frescos sin forzar el motor.

3. Revisa los sellos de las puertas: Los sellos de goma de las puertas deben estar en buen estado. Si están dañados, el aire frío escapará, haciendo que el compresor trabaje más de lo necesario. Reemplázalos si notas fugas.

4. No sobrecargar la heladera: Si llenas demasiado el refrigerador, dificultas la circulación del aire frío, lo que obliga al motor a trabajar más para mantener la temperatura.

5. Descongelar cuando sea necesario: Si tu heladera no tiene sistema No Frost, descongélala regularmente para evitar la acumulación de hielo que puede interferir con su funcionamiento.

Siguiendo estos simples pasos, podrás evitar problemas comunes y alargar la vida de tu heladera.